Todas las piscinas tienen un sistema de filtración para mantener el agua limpia, libre de algas y bacterias. Los dos componentes más importantes de dicho sistema son: el filtro y la bomba El filtro de la piscina es el mecanismo principal de limpieza y purificación del agua, y desempeña una tarea crucial para mantener el agua cristalina y apta para el baño. Los filtros de arena son los más habituales y, al mismo tiempo, son también los que requieren un menor mantenimiento.
El agua se limpia pasando a través de un depósito de arena. A medida que el agua es filtrada, las partículas de suciedad se quedan atrapadas en el lecho filtrante antes de que el agua sea devuelta a la piscina..